Cd. de México.- De enero a la fecha más de 2 mil armas han sido retiradas de calles y hogares a través del programa «Sí al desarme, sí a la paz», lo que ha contribuido a la reducción de la violencia, afirmaron autoridades.
En el Día Internacional de la Destrucción de Armas de Fuego, la Presidenta Claudia Sheinbaum encabezó un evento en el atrio de la Basílica de Guadalupe para promover el programa, que busca retirar armas de fuego o juguetes bélicos a cambio de dinero o juguetes educativos.
«En atención a las causas (de la violencia) está este programa de desarme, que ninguna familia tenga un arma en su cas,a que busquemos la manera distinta de relacionarnos entre todas las familias, entre todas las personas mexicanas, que ningún arma acabe con la vida de una persona, esa es la esencia del programa que presentamos», destacó la Mandataria en su discurso.
La Presidenta Sheinbaum afirmó que para frenar la violencia es necesario contar con mejores policías y fiscalías, fortalecer el Poder Judicial e involucrar a los jóvenes en el estudio y evitar que tengan contacto con las armas.
«Nosotros estamos convencidos que hay que fortalecer la Guardia Nacional, que hay que hacer inteligencia e investigación, que hay que coordinarse, que tenemos que tener mejores policías, que tenemos que tener mejores fiscalías, un mejor Poder Judicial, pero no puede haber una política de seguridad de construcción de la paz, de construcción de la justicia si no se atienden las causas profundas de la violencia», dijo ante autoridades militares y de la Iglesia.
«Y la única manera de atender las causas es atendiendo a las y a los jóvenes, dándoles derechos, el acceso a los derechos, haciendo todo lo que esté en nuestras manos para que ningún joven se quede sin estudiar, para que ningún joven se quede sin acceso a la educación. Pero también que todos los jóvenes puedan tener acceso al deporte si así lo desean, que todas y todos los jóvenes puedan tener acceso a la cultura si así lo desean, que las y los jóvenes nunca se sientan solos, que nunca ni el Gobierno ni la sociedad los van a dejar solos».
En su participación, la Presidenta leyó unas palabras para la ocasión.
«Hoy nos reunimos con el corazón abierto, como siempre con la esperanza encendida y con la firme convicción de que estamos construyendo el mejor México posible, donde las balas no hieran a las personas, sino que se escondan, desaparezcan, donde no hablen las armas, las balas, más alto que las palabras, que las palabras siempre vuelen alto un mundo donde las niñas y los niños, no importa en qué región vivan del País, no tengan miedo», citó.
«Cada disparo que se evita es una palabra que se puede decir, cada arma que se apaga es un alma que se salva, decimos sí a la paz, no como una palabra bonita para los discursos, sino como una elección de vida, la paz se construye cada día con valentía, con perdón, con amor, no es ausencia de conflicto, es la capacidad de enfrentarlos sin destruirlos, extender la mano al que se quedó atrás, es como es el pueblo de México fraterno y solidario, desarmarnos no es solo dejar caer el metal al suelo, es también soltar el odio, la venganza, la indiferencia, es mirar a la otra, al otro, y ver a un ser humano, no a un enemigo, a un adversario».
Autoridades eclesiásticas como monseñor Efraín Hernández, rector de la Basílica, y monseñor Salvador González, Obispo Auxiliar de la Arquidiócesis Primada de México, asistieron al evento.
En el acto se informó que de octubre de 2024 a junio de 2025 los homicidios en el País se han reducido 25 por ciento, resultado que se atribuye a una estrategia de seguridad basada en la atención a las causas, fortalecimiento de las instituciones de seguridad, inteligencia e investigación y coordinación entre niveles de Gobierno.
La Presidenta de la paz
En su discurso, la Secretaría de Gobernación, Rosa Isela Rodríguez, calificó a Sheinbaum como la Presidenta de la paz.
«Con su permiso señora Presidenta de México, Presidenta de la paz, Claudia Sheinbaum Pardo», le saludó.
«Regresamos a la Basílica de Guadalupe tras 180 días de haber iniciado aquí el programa 'Sí al desarme, sí a la paz' para reafirmar el compromiso de trabajar todos los días por la paz y la tranquilidad de nuestras comunidades, estamos retirando las armas de fuego municiones y explosivos de los hogares, de las calles, de las comunidades, así se salvan vidas, se previenen accidentes, se evitan tragedias y se cortan ciclos de violencia», expuso la funcionaria.
Rodríguez detalló que a julio de 2025 las personas se han entregado de manera voluntaria y anónima 2 mil 135 armas de fuego, entre estas, mil 585 armas cortas y 550 armas largas, además de 200 granadas, cartuchos de dinamita, cápsulas fulminantes y 85 mil cartuchos.
«La paz empieza en casa, pero no se trata solo de cifras, sino de vidas humanas, cada arma entregada representa una tragedia que no ocurrió, una bala que no se disparó, una familia que no tuvo que llorar», comentó Rodríguez.
En el evento, Claudia Curiel, Secretaria de Cultura, anunció que con las armas, ya destruidas e intervenidas, se van a crear piezas artísticas.
En el atrio de la Basílica fue colocado un estand para la destrucción de armas cortas y largas, decomisadas en distintas zonas del País, entre ellas, una AR-15, una cuerno de chivo y una escopeta.
La Presidenta presenció el proceso de destrucción, pero una vez que se retiró, el puesto fue desmontado, por lo que no hubo espacio para el canje de armas.