Óscar Fernández, entrenador de las Bravas de Juárez, consideró que el partido del sábado por la noche contra Atlas fue el típico de una primera jornada, con muchas imprecisiones en sus jugadoras, aunque al final se queda satisfecho con el punto sumado. Juarenses y atlistas terminaron empatadas 1-1 sobre la cancha del Estadio Benito Juárez en el arranque del torneo Apertura 2025 de la Liga MX Femenil.
“Del equipo, pues un partido de jornada uno, realmente creo que muy imprecisas con balón, hemos perdido demasiados balones sobre todo en la zona de inicio de desarrollo, hemos arriesgado muchísimo porque el terreno de juego con la lluvia estaba muy rápido, intentábamos… al final… nosotros si teníamos que salir a presionar, nos salían a presionar, arriesgando situaciones para encontrar esas espaldas, creo que lo hemos hecho, pero al final nos faltaba ese… cuando llegaba el balón a ellas a zona de intermedia, pues dar ese pase bueno. Tenemos dos ocasiones muy claras de mano a mano, que era lo que buscábamos con esa intención de atraer”, dijo el técnico español en la conferencia de prensa post partido.
“Al final, recuperando sensaciones del equipo, de una pretemporada muy difícil otra vez, otro verano muy difícil, con muchas bajas por las jugadoras que están en la Copa Africana más las lesiones. Y creo que contento como se ha desarrollado el trabajo de las jugadoras, que han seguido muy bien el plan y uno de los objetivos de este torneo es sumar, sumar, sumar puntos, hemos sumado uno, queríamos evidentemente sumar los tres, pero todo lo que sea sumar, al final es un rival directo, es liguilla, consiguieron liguilla el torneo pasado y un punto más para nosotras”, añadió Fernández.
El timonel de las Bravas resaltó que de por sí es difícil la primera jornada de cada torneo porque llegan sin jugar partidos de nivel, y al juego de este sábado se le tuvo que agregar la pausa que tuvieron que hacer en pleno partido por la presencia de una tormenta eléctrica.
“No hemos jugado ningún partido en cancha natural esta pretemporada y esas dificultades que te genera todo eso, pues la ansiedad que tienen las jugadoras por jugar, después de tantos meses, todas las emociones y el inicio con la lluvia, con la tormenta, que se para, que luego volvemos a jugar, que otros 25 minutos y nos volvemos a meter. Luego la segunda parte con todo el tema del arbitraje, pues al final ha sido un partido difícil y creo que estoy contento porque emocionalmente lo hemos vivido bien.”
El próximo viernes, las Bravas volverán a jugar ante su afición cuando reciban a las Enfranjadas del Puebla a partir de las 9:00 de la noche.