El nombre del Presidente Donald Trump apareció en una lista de colaboradores de un libro que celebra el 50 cumpleaños del financiero caído en desgracia Jeffrey Epstein, evidencia de que participó en la colección aun cuando negó haber firmado una nota y un dibujo sexualmente sugerentes.
El nombre de Trump figura entre las docenas de conocidos de Epstein a quienes se les pidió que contribuyeran con mensajes de cumpleaños para el libro encuadernado en cuero en 2003. La lista, revisada por The New York Times, incluye a conocidos colaboradores de Epstein como Leslie Wexner, entonces propietaria de Victoria's Secret y otras tiendas; Alan Greenberg, quien dirigía la empresa de Wall Street Bear Stearns, que se encontraba en crisis; y el físico Murray Gell-Mann. Greenberg y Gell-Mann ya fallecieron.
El Times también revisó una carta introductoria al libro, escrita a mano por Ghislaine Maxwell, socia de Epstein desde hace mucho tiempo, quien está cumpliendo una sentencia de 20 años de prisión por conspirar para traficar sexualmente con menores.
No es ningún secreto que Trump y Epstein fueron amigos en la década de 1990 y principios de la década de 2000, antes de que Epstein fuera condenado por delitos sexuales en 2008. Pero frente a intensas críticas por la negativa de su Administración a publicar archivos relacionados con las investigaciones gubernamentales sobre Epstein, Trump recientemente ha tratado de restar importancia al alcance de su relación.
El Presidente demandó a The Wall Street Journal por difamación tras informar el 17 de julio que había firmado la nota y el dibujo del libro, un álbum encuadernado en cuero compilado por Maxwell para conmemorar el cumpleaños de Epstein. El Journal describió el dibujo como el contorno de una mujer desnuda con la firma de Trump debajo de la cintura, lo que sugería vello púbico. Citó una conversación imaginaria entre Trump y Epstein que concluyó con las palabras de Trump: «Que cada día sea otro maravilloso secreto».
Poco después de que el Journal publicara su artículo, Trump respondió en su red social, Truth Social, escribiendo: «La supuesta carta que publicaron del Presidente Trump a Epstein era FALSA».
El jueves, un portavoz de la Casa Blanca, Steven Cheung, dijo en un comunicado que Trump había expulsado a Epstein de Mar-a-Lago, su club en Florida, «por ser un pervertido».
«Esto no es más que una continuación de las noticias falsas inventadas por los demócratas y los medios liberales», dijo Cheung. Un abogado de Maxwell no hizo comentarios de inmediato. Un portavoz de Wexner declinó hacer comentarios.
El Times descubrió que al menos una vez antes, Trump le había escrito a Epstein una nota de admiración.
«Para Jeff: ¡Eres el mejor!», se lee en una inscripción en una copia del libro de Trump «Trump: El arte del regreso» que pertenecía a Epstein.
El mensaje, revisado por el Times, está firmado «Donald» y fechado «octubre de 1997», el mes en que salió el libro.
La polémica sobre los archivos de Epstein que ha envuelto a Washington este verano no da señales de amainar, a pesar de los esfuerzos de Trump por cambiar de tema. El miércoles, un comité clave de la Cámara de Representantes votó a favor de citar judicialmente los archivos del Departamento de Justicia, incluso mientras el Presidente de la Cámara, Mike Johnson, buscaba llevar la cámara a un receso de verano sin votar si presionar al Gobierno para que los publicara.
La controversia sobre el libro de cumpleaños no ha hecho más que intensificarse en la semana transcurrida desde el informe inicial del Journal. El miércoles por la noche, Brad Edwards, abogado de algunas de las víctimas de Epstein, declaró en MSNBC que el libro estaba en posesión de los herederos de Epstein, y el representante Ro Khanna, demócrata por California, anunció que planeaba citar a los herederos para que entregaran el libro.
Los herederos de Epstein emitieron un comunicado el jueves diciendo que cumplirían con todos los procesos legales.
Maxwell ha asumido un papel protagónico en el drama: un destacado abogado del Departamento de Justicia se reunió con ella el jueves, aunque ni el departamento ni sus abogados revelaron el contenido de la conversación. Un comité de la Cámara de Representantes ha indicado que le gustaría que testificara en una audiencia en agosto.
El Times no ha revisado la carta que supuestamente lleva la firma de Trump.
En su carta de presentación a Epstein, escrita en negro sobre una cartulina texturizada, Maxwell explicó que la idea del libro era «recopilar historias y fotografías antiguas para refrescar la memoria sobre lugares, personas y diferentes eventos».
«Algunas cartas sin duda lograrán su objetivo; otras, bueno… tendrás que leerlas para comprobarlo tú mismo. Sé que disfrutarás hojeando el libro, y espero que disfrutes tanto leyéndolo como yo disfruté completándolo», escribió.
Antes de firmar, le deseó a Epstein un «Feliz, Feliz Cumpleaños».
Para entonces, Trump y Epstein se conocían desde hacía años. Su relación se remontaba al menos a 1992, cuando estuvieron juntos en una fiesta en Mar-a-Lago.
El Times también revisó una foto no revelada previamente de Trump y Epstein con el cantante James Brown. No está claro dónde se tomó la foto. Brown actuaba regularmente en Atlantic City, Nueva Jersey, donde Trump era dueño del casino Taj Mahal.
En la foto, Brown está flanqueado por Epstein, que viste un jersey de cuello alto blanco y un blazer oscuro, y Trump, que viste un traje y una corbata rosa.
Trump y Epstein mantuvieron una relación amistosa hasta bien entrada la década del 2000. En 2002, Trump declaró a la revista New York que Epstein era un tipo estupendo. Añadió: «Incluso se dice que le gustan las mujeres hermosas tanto como a mí, y muchas de ellas son jóvenes. Sin duda, Jeffrey disfruta de su vida social».
Varias mujeres que estaban en la órbita de Epstein han dicho que conocieron a Trump en la década de 1990.
Stacey Williams, ex modelo de trajes de baño de Sports Illustrated que salía con Epstein, ha declarado que Trump la manoseó cuando lo visitaron en la Torre Trump. Maria Farmer, quien posteriormente trabajó para Epstein, afirmó que Trump la miró con lujuria antes de que Epstein le dijera: «Ella no está aquí para ti».
Trump ha negado previamente las acusaciones de ambas mujeres.
La relación entre Trump y Epstein pareció diluirse alrededor de 2004, después de que ambos compitieran por una propiedad inmobiliaria en Palm Beach, Florida. El futuro Presidente se impuso y compró la propiedad frente al mar por 41 millones de dólares.