Ciudad Juárez.- La Fiscalía General de la República (FGR) solicitó acusar a tres detenidos en posesión de más de 20 kilos de cocaína a través de un procedimiento abreviado -que terminó en sentencia condenatoria y, aun así, libertad condicional- debido a contradicciones entre las circunstancias del arresto reportadas por la Agencia Estatal de Investigación (AEI) y la narración de testigos.
De acuerdo con el Informe Policial Homologado (IPH), la detención tuvo lugar luego de que los ya juzgados fueron sorprendidos por agentes estatales en plena vía pública -en la colonia Reforma- mientras dos de ellos descargaban una caja de un carro y se les cayó un “paquete cuadrado color café” que los oficiales sospecharon era droga.
Información presentada por la defensa, sin embargo, sostuvo que la aprehensión se llevó a cabo después de que uno de los detenidos, en compañía de dos mujeres y dos menores de edad, llegó a un taller mecánico en el que se encontraban los otros dos después también arrestados.
“Cuando vemos que tenemos debilidades para ir a juicio y proporcionan datos objetivos para investigar otras líneas, ofertamos procedimientos abreviados con menor pena”, indicó una fuente del Ministerio Público Federal (MPF).
“Existe un alto grado de probabilidad que, una vez desahogadas las testimoniales que la defensa ofrece, repercuta en una resolución adversa de no vinculación a proceso”, agregó.
Los detenidos fueron identificados como Gustavo Adolfo C. H., de 22 años de edad; Jaime Joel L. Z, de 47, y Benito A. A., de 55, sentenciados el 11 de marzo a cuatro años de trabajo comunitario luego de haber sido encontrados culpables del delito contra la salud en modalidad de posesión de clorhidrato de cocaína con fines de comercio en variante de venta.
Versión de la AEI
La versión de la AEI establece que los tres fueron encontrados gracias a que, mientras los oficiales circulaban sobre la calle Municipio Libre alrededor de las 15:18 horas del 1 de marzo, un transeúnte les hizo señas para que se detuvieran y les indicó que, en la esquina de las calles Luis G. Urbina y Efrén Ornelas, se había cruzado con un hombre al que había escuchado decir por teléfono “ya estoy aquí con el perico, en qué tiempo llegas”.
El denunciante, de acuerdo con esta narración, había presenciado este mensaje justo “al momento de ir pasando al costado” del hombre al teléfono, a quien también había visto previamente descender de un vehículo tipo vagoneta Honda blanco con placas de Chihuahua, en el que había otros dos individuos.
Con estas indicaciones, agrega la versión de la AEI, los estatales llegaron al cruce citado alrededor de las 15:20 horas y, estacionada en la acera derecha, vieron la unidad con las características reportadas.
“Se encontraba con la puerta del copiloto y la puerta trasera del lado del piloto abiertas y fuera del vehículo, en la parte de atrás, en el área de la cajuela, observamos a dos masculinos (…) los cuales estaban bajando de la parte de la cajuela del vehículo una caja de cartón en color café, momento en el que, de la parte de debajo de la caja, se cae un paquete cuadrado en color café, percatándonos que dicho paquete, y por las máximas de la experiencia, está confeccionado como comúnmente se empaqueta la droga, por lo que inmediatamente encendimos los códigos y la sirena”, dice el informe.
“Se percatan de nuestra presencia y apresuradamente avientan la caja de cartón a la cajuela del vehículo y el masculino de camisa de cuadros blancos con gris levanta rápidamente del suelo el paquete que se les había caído y lo avienta a la caja de cartón para cerrar apresuradamente la cajuela y abordar el vehículo”, agrega.
El mismo IPH establece que los sorprendidos encendieron la marcha para emprender la huida, pero esta fue impedida por una unidad oficial que les cerró el paso, después de lo cual uno de los estatales se identificó, indicó a los presuntos que habían sido señalados por denuncia anónima, realizó la inspección de la cajuela y después al arresto.
“Observando -los agentes- a simple vista caja de cartón en color café con la leyenda ‘Huevos calidad Cajeme’ y, en su interior, varios paquetes confeccionados con cinta canela” que resultaron ser 26.5 kilos de cocaína.
La defensa, por separado, de acuerdo con datos obtenidos por este medio, presentó el testimonio de la esposa de uno de los arrestados y dictámenes en psicología de dos menores de edad presentes en el arresto cuyas declaraciones, como la de la mujer, contrastaron con el IPH.
“Fue cuando llegamos (a un taller mecánico) alrededor de las 13:45 pm, que mi esposo se estacionó y solamente fue él quien se bajó, mientras mis dos hijas, la novia de Gustavo y yo lo esperábamos en mi camioneta Honda de color blanco. Él entró por la puerta pequeña que tenía el taller en la parte de enfrente y del taller salió el señor Benito y el señor Gustavo, quienes son amigos de mi esposo”, narró la mujer.
“Mientras mi esposo seguía dentro del taller, Benito y Gustavo salieron por esa misma puerta que entró mi esposo, y fue cuando se acercaron varias trocas blancas y comenzaron a bajarse muchos oficiales, tirándolos al piso y acercándose a la camioneta en donde estábamos nosotras (…) el oficial que me había abierto la puerta se regresó muy enojado y comenzó a gritarme muchas groserías de que con quién hablaba, que le diera el teléfono y fue que algunos vecinos salieron y comenzaron a grabar lo que estaba pasando y también les comenzó a gritar”, agrega esta versión.
La misma menciona que el oficial revisó la cajuela del vehículo y encontró sólo maletas con ropa, después de lo cual la testigo también vio a los amigos de su esposo en el piso mientras que a él “lo estaban sacando de adentro del taller y lo subían a una camioneta”.
Fue por estas diferencias entre las narraciones y la posibilidad de que de los datos de la defensa -que también presentó videos- se desprendan otras líneas de investigación, indica la información obtenida por este medio, que el MPF optó por un procedimiento abreviado, el cual concede a los acusados reducción de penas a cambio de que acepten las acusaciones.
“De las entrevistas de la exesposa e hijas del C. Jaime Joel L. Z., se desprende una versión alterna a la manifestada por los elementos aprehensores en el informe policial homologado, mismos testigos que pretenden ser desahogados ante el Juez de Control”, indica la información.
En la puesta a disposición, la AEI indicó al MPF haber entregado los cuadros confeccionados con “un peso aproximado de 26,540” gramos.
En los hechos materia de acusación presentados por la FGR y citados en el fallo, el juez federal Avelino Orozco Córdova cita “un peso neto recibido de 23544.5 gramos”.
El resolutor conmutó los cuatro años de prisión solicitados por la FGR por trabajo comunitario para los tres sentenciados, que aceptaron la responsabilidad por la posesión de la droga.