Ciudad de México.- Luego de varios años de disputas legales, el empresario español Nicolás Vallejo-Nágera, mejor conocido como «Colate», le habría ganado a su ex pareja, la cantante Paulina Rubio, la custodia de su hijo Andrea Nicolás.
De acuerdo con la revista People, una jueza de Estados Unidos entregó recientemente la autorización al ejecutivo para que pueda viajar con él a España.
La cantante denunció a su ex marido en la Corte de Florida a principios de julio acusándolo de «retener contra su voluntad» al niño desde su graduación el pasado 5 de junio, último día que supuestamente estuvo con ella.
Según la mexicana, «Colate» habría impedido que Nicolás volviera a su casa con ella, además que estaría manipulándolo para que se fuera a vivir con él a España, por lo que Rubio habría solicitado a una jueza que no le permitiera al joven ver a su padre.
El empresario dijo a medios españoles que llevó a su hijo a la residencia de la mexicana cuando le correspondía, pero que Paulina no estaba. Lamentó el hecho de que su madre supuestamente lo «agrediera» en mayo pasado, tras arrebatarle su celular, por lo que el niño estaría «pasando probablemente por el peor momento de su vida».
Ante esto, una jueza le dio la razón a «Colate», permitiendo finalmente a Nico viajar a España en contra de los deseos de Rubio, además de ordenar a la ex pareja que continúen recibiendo terapia familiar junto a su hijo para intentar resolver sus diferencias.
Esta sería una nueva victoria en la interminable batalla judicial que mantienen desde su separación en 2010, y sobre la que el empresario ha preferido no entrar en detalles.
«Yo no voy a decir nada… Yo no puedo decir nada en estos momentos», expresó «Colate» a Europa Press tras regresar a su casa a Madrid, a inicios de esta semana.
«Me encuentro muy bien, muy contento y muy feliz de estar aquí», aseguró, añadiendo que está alegre de poder disfrutar de las vacaciones en España con Nicolás, reconociendo que la última demanda de Paulina por «secuestrar» a su hijo le parece algo «surrealista».
«Todo es tan disparatado que mejor no digo nada y, bueno, al final no sé, no sé qué decir, la verdad», añadió, sin revelar cuándo llegará el niño a España y cuánto tiempo estarán juntos.