La balacera que dejó seis muertos en Gran Morelos durante la tradicional “Carrejoneada” fue por un pleito familiar en el que fallecieron dos hijos del exalcalde Gilberto Gutiérrez Montes, identificados como Gilberto Gutiérrez Nevárez, de 26 años, y Socorro Gutiérrez Nevárez, de 20, además de su primo Edmundo Aníbal Gutiérrez Ponce, de 33.
“Lamentamos mucho la situación porque son familias y es algo muy triste. Éramos de los municipios más tranquilos, teníamos muchos años que no pasaba nada y ahora con estas cosas”, expresó el actual alcalde de Gran Morelos, Óscar Luis Miramontes Pérez, apodado “Quilín”.
El edil, con tono cansado y visiblemente afectado por los hechos, relató que la balacera del fin de semana ocurrió durante la tradicional “Carrejoneada” en la comunidad de San Nicolás de Carretas, a la que asistieron entre 600 y 700 personas.
Ahí comenzó una riña entre parientes que terminó con seis muertos, -dos de ellos hijos de un exalcalde- y entre nueve y 10 lesionados. Dijo que él mismo trasladó en su camioneta a cinco heridos al hospital de Chihuahua. Todos presentaban lesiones leves y ya fueron dados de alta.
Miramontes Pérez subrayó que aunque circularon versiones sobre un enfrentamiento del crimen organizado, todo apunta a un conflicto familiar. “Son primos hermanos, no tiene nada que ver con grupos criminales”, insistió.
Sin embargo, fuentes extraoficiales informaron a El Diario que Edmundo Aníbal Gutiérrez Ponce pertenecería a un grupo criminal que opera en la región, aunque la versión no fue confirmada por las autoridades hasta el cierre de esta edición.
El edil dijo que intentó acercarse para calmar los ánimos, pero al escuchar los disparos tuvo que retirarse. Aseguró que conocía a las víctimas porque en el municipio todos saben quiénes son.
Tras los primeros tiros, la multitud corrió para resguardarse en casas y vehículos. Hubo reportes de desaparecidos que después regresaron sanos porque estaban escondidos debido al miedo; personas mayores también buscaron refugio en viviendas de vecinos. La violencia obligó a cancelar la ceremonia del Grito de Independencia.
“Decidimos cancelarla, de todas maneras la gente no sale, tenemos la moral muy baja”, comentó.
El alcalde informó que Gran Morelos está resguardado por la Guardia Nacional, elementos del Segundo Batallón de Infantería y ministeriales provenientes de Santa Isabel y Chihuahua.
“Ahorita está todo muy resguardado, la población puede salir con confianza”, afirmó. Agregó que solicitó que las fuerzas federales permanezcan entre ocho y 10 días para mantener la calma mientras esclarecen los hechos.
Aunque no saben con certeza de dónde provenían todas las armas ni cuántos tiradores hubo, las autoridades municipales y estatales trabajan para aclarar lo ocurrido.
“Esto empezó como una riña familiar y terminó en otra cosa”, reconoció el alcalde, quien reiteró su llamado a la calma y a la solidaridad con las familias afectadas en un municipio que hasta hace unos días era considerado uno de los más tranquilos del estado.