Chihuahua, Chih.- Con siete policías quedó el municipio de Gran Morelos, luego de que procesaran al Director de Seguridad Pública y detuvieran a seis policías más–por la matanza del domingo 14–, de los cuales liberaron cuatro y dos quedaron detenidos; sin embargo, las cosas están muy tranquilas con el resguardo de la Guardia Nacional y el ejército, también ya solicitó apoyo al municipio de Chihuahua para que los apoye con dos elementos más, aseguró el alcalde Óscar Luis Miramontes Pérez.
El presidente municipal explicó que, tras la detención del director y de seis agentes de la corporación local, la plantilla se redujo de forma drástica y actualmente solo se cuenta con siete elementos para cubrir las necesidades de seguridad pública. Precisó que cuatro de los policías detenidos ya recuperaron su libertad, mientras que dos permanecen bajo proceso sin que se le hayan informado aún los motivos legales de su retención. Indicó que mantiene comunicación con el abogado defensor para conocer en el transcurso de las próximas horas la situación jurídica de esos elementos.
Miramontes Pérez afirmó que, pese a la reducción del personal, la seguridad en el municipio se encuentra estable y tranquila, gracias a la presencia permanente de la Guardia Nacional, del Ejército Mexicano y de personal de la Fiscalía General del Estado que realiza patrullajes y operativos preventivos en distintas comunidades. Reiteró que durante estas primeras semanas después de los hechos violentos se mantiene una vigilancia especial para evitar nuevos incidentes.
Al referirse a la muerte del oficial de Estados Unidos que se encontraba de vacaciones en Gran Morelos, el alcalde lamentó profundamente el suceso y sostuvo que se trató de un hecho que escapó del control del gobierno municipal. Explicó que el visitante, miembro del Ejército estadounidense, había acudido al municipio para pedir matrimonio a su pareja, quien resultó herida en el evento del 14 de septiembre, y reiteró que ni él ni su administración tuvieron participación en ese incidente. “Lo lamentamos todos en el pueblo, pero no está en nuestras manos; corresponde a otras autoridades”, expresó.
Respecto a la Dirección de Seguridad Pública, informó que el titular ya fue dado de baja y que se solicitó formalmente al Ayuntamiento de Chihuahua el envío de dos o tres elementos adicionales para reforzar las labores de vigilancia. Detalló que, debido a los acontecimientos recientes, las personas del lugar y sus alrededores no quieren adherirse a la corporación, por lo que se busca traer personal de fuera que garantice la operatividad del área mientras se reorganiza la policía municipal.
Finalmente, Miramontes subrayó que los hechos violentos registrados obedecen a un conflicto familiar entre las víctimas y que actualmente las calles de Gran Morelos se encuentran tranquilas y bajo resguardo. Añadió que la Presidencia Municipal sigue trabajando de manera normal y que su administración no detendrá las actividades del ayuntamiento.