Con 30 años de carrera judicial, la jueza de lo familiar Patricia Martínez Téllez sabe que “a nadie le sirven las sentencias de papel”, sino que es necesario romper círculos de violencia y mejorar la salud mental en los entornos familiares de Juárez.
“Necesitamos ir al fondo para realmente cambiar y que las familias estén bien y protegerlas, y si están tan lastimados o quebrantados esos vínculos familiares, debemos de fortalecerlos”, comentó.
La candidata a magistrada federal del Tribunal Colegiado de Circuito contó a El Diario que han sido 30 años de trabajo en el Poder Judicial del Estado, y 34 de lucha por especializarse en la labor jurisdiccional y promover la justicia, luego del asesinato de su esposo el doctor Víctor Manuel Oropeza Contreras, editorialista de este medio de comunicación, en 1991.
Sin el crédito correspondiente (y que, dijo, tampoco lo requiere), proyectos suyos como la implementación de denuncias anónimas y sistemas de recompensas han llegado a las legislaciones y se han convertido en políticas públicas.
También impulsó la visita de personas juzgadores de Chihuahua en materia civil, familiar y penal a Estados Unidos para observar cómo se realizaban los juicios orales, cuando el sistema acusatorio empezó a implementarse en el país a partir de 2006.
Platicó que en su juzgado, el Octavo, los asuntos se buscan resolver pronto, de una manera conciliatoria y acuerdos comunes, por lo que no existe rezago y, por el contrario, se le ha pedido apoyar en la implementación de mediaciones en otros juzgados.
Al entrar al juzgado de Martínez Téllez, existe una sala pequeña, llena de colores y juguetes, parafernalia de cine con personajes de ficción. Ese también es un proyecto suyo, resaltó. Son salas lúdicas en las que niñas y niños expresan su voz y sus deseos en asuntos de materia familiar.
“Ese espacio lúdico sirve también para las entrevistas con los menores de edad, que también es bien diferente y la gente no lo sabe: a un juzgado familiar, un niño va a ejercer un derecho”.
Implementó la rehabilitación psicoemocional de padres y madres en un círculo de violencia, impulsó el Código Nacional de Procedimientos Civiles y Familiares y e incursionó con un Centro de Convivencia Vigilada, donde inclusive se resuelven asuntos de su competencia, destacó.
No obstante, ahora busca una magistratura federal. Estos puestos llevan diversas materias: la penal, civil, laboral familiar. “Cuando alguien se inconforma con una resolución de un juez del fuero común, apela con un magistrado del estado, y si se inconforman con la resolución que hizo el magistrado estatal, me voy a la Federación”, explicó. Se acude al Tribunal Colegiado de Circuito, en la que espera seguir proponiendo proyectos que permitan mejorar los procedimientos de las diversas materias.
El salto llama la atención: de una carrera en el Poder Judicial del Estado busca ahora irse a la Federación.
No hay manera de separar la carrera de Martínez Téllez de lo traumática que fue para ella la muerte violenta de su esposo, Oropeza Contreras. Entonces decidió estudiar Derecho, prepararse, y cuestionar a las autoridades por ese asesinato irresoluto.
“Esa ha sido mi lucha, seguir con la lucha que mi esposo tuvo toda su vida y que le costó la vida. Una investigación que hizo la Comisión de la Verdad llegó a la conclusión de que fue el Estado”, acusó.
Esa exigencia de justicia hizo que César Duarte y Javier Corral le cerraran las puertas de las magistraturas estatales, cuando su perfil está lleno de títulos, proyectos exitosos y respaldo profesional, contó.
Por ello, un proceso democrático como estas elecciones judiciales fueron clave para buscar esta nueva etapa de su vida profesional. “De otra forma nunca hubiera llegado a ser nominada, a ser considerada como idónea”, dijo. Con la vista de México sobre las elecciones de juzgados y magistraturas, ahora sí fue electa como candidata e inclusive declinó otros puestos para buscar entrar a la Federación.
“Seguiremos trabajando como lo hemos hecho. Mi lucha y mi trabajo continúa”.
Patricia Martínez Téllez se postula en la boleta rosa federal para magistradas y magistrados de circuito, en el apartado de mujeres candidatas bajo el número 06.
‘Es necesario romper los círculos de violencia’
