Ciudad Juárez.- Un juez de control interino desde 2024 e inscrito al Tribunal Especializado en Violencia de Género impuso a un acusado de violar a su propia hija de tres años no la prisión preventiva sino libertad condicionada a firmas mensuales en Ciudad Judicial y no acercarse a la víctima, lo que generó suspicacia y molestia en la madre de la niña y su asesor jurídico.
El caso tomó nueve meses en judicializarse pese a que existían las periciales pertinentes para iniciar el proceso penal, reclamó Gabriel García Otamendi, asesor legal de la madre.
Una vez judicializada, se le avisó a la mujer de la audiencia inicial una hora antes de empezar, en marzo de 2025, y a su llegada apresurada a la sala se reagendó para que conociera la carpeta de investigación del caso de su propia hija. El hecho ocurrió en junio de 2024, y por razones no dadas a conocer a la madre, el caso no se había llevado a los juzgados.
Jesús Alonso C. A. lleva el proceso en libertad desde abril de 2025, luego de que solicitó un amparo de la justicia federal en contra de su detención. No obstante, en mayo el Juzgado Séptimo de Distrito a cargo de Claudia López López sobreseyó el amparo, por lo que la suspensión provisional que le permitía no ser detenido ni ser llevado a prisión preventiva feneció.
El 19 de junio, el asesor particular solicitó al juez Alain González Ibarra una audiencia para revisar las medidas cautelares de C. A. y buscar la prisión preventiva.
Para García Otamendi, debido a que en la apelación del sobreseimiento la defensa del presunto violador no controvirtió el levantamiento de la suspensión provisional contra detenciones, era posible la prisión preventiva, pero para el juez no fue así.