Aproximadamente 50 estudiantes de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez (UACJ) realizaron ayer una manifestación frente a Rectoría para demandar el restablecimiento del servicio de transporte universitario conocido como Indiobús, suspendido desde la pandemia y no reactivado en su totalidad tras el regreso a clases presenciales.
Durante la protesta, Abdel García, estudiante de Matemáticas e integrante del Frente Estudiantil de la UACJ, explicó que la exigencia principal es que el servicio vuelva a operar de manera gratuita y en todos los campus, como ocurría antes de 2019.
Señaló que actualmente el Campus Norte carece del sistema, lo que obliga a los alumnos a depender de rutas convencionales o plataformas privadas, con un gasto semanal de entre 200 y 400 pesos por persona.
Según encuestas aplicadas por el Frente Estudiantil, las principales problemáticas son la saturación de unidades, tiempos de espera prolongados y sensación de inseguridad en las paradas y trayectos, lo que repercute en la puntualidad y desempeño académico del alumnado.
Tras la manifestación al exterior, los estudiantes fueron recibidos dentro de Rectoría por el rector, Daniel Alberto Constandse Cortez, acompañado del secretario general Salvador David Nava Martínez.
El rector escuchó los planteamientos de los cerca de 50 alumnos y aseguró que la institución trabaja en gestiones con las autoridades correspondientes.
“Tenemos perfectamente claro el problema del transporte y hemos estado haciendo las gestiones necesarias”, dijo.
Agregó que el interés principal es el bienestar de los estudiantes y que no estarán solos en sus demandas.
Antes de concluir, Constandse Cortez designó al director general de Bienestar Universitario, Pedro Yáñez, como representante institucional para dar seguimiento al diálogo.
En su primera intervención, Yáñez explicó que el Indiobús opera actualmente con entre 34 y 36 unidades a cargo de la empresa privada Cetepi, con servicio exclusivo hacia Ciudad Universitaria, donde se trasladan diariamente entre 2 mil 500 y 3 mil personas aproximadamente.
Señaló que los campus del norte dependen del transporte público concesionado, con deficiencias de cobertura y horarios, y precisó que, aunque no es responsabilidad directa de la universidad garantizar transporte público, existe disposición para colaborar con el Gobierno del Estado y las concesionarias.
Más tarde, en la sala Calmécac, las autoridades universitarias y los manifestantes acordaron instaurar mesas de trabajo en las que participarán tres representantes estudiantiles por cada instituto (ICSA, ICB, IADA e IIT), además de Ciudad Universitaria.
El objetivo será revisar diagnósticos, planes y posibles proyectos para mejorar la movilidad de la comunidad universitaria.
Yáñez indicó que los estudiantes se integrarán al diagnóstico que realiza la universidad y que se mantendrá coordinación con las autoridades estatales para buscar soluciones conjuntas.
Añadió que, aunque cualquier ampliación del servicio requeriría recursos extraordinarios y un proceso de licitación, no se contempla cobrar a los alumnos, ya que el Indiobús siempre ha sido gratuito.
La reunión concluyó con la firma de una minuta entre las autoridades y los representantes estudiantiles, en la que se estableció la creación de mesas de trabajo y la fecha de la próxima reunión, programada para la primera semana de septiembre.