La parálisis cerebral espástica, no impidió que William Eliot Barrientos, de 15 años, cumpliera su sueño de cantar.
“Yo no estudié, me nació de corazón, yo cantaba en el baño desde el kínder, a mí me descubrió mi mamá”, comentó.
William contó que es estudiante de nuevo ingreso de preparatoria en la carrera de Administración de Empresas, en el Politécnico de Ciudad Juárez, pero ayer en agradecimiento por el apoyo que le brindó el personal y compañeros de la Escuela Secundaria Federal #15 durante su estancia, cantó un repertorio de música mexicana en las instalaciones de Pueblito Mexicano, en el evento conmemorativo de la Independencia de México.
William ha recibido el apoyo desde pequeño por parte de su familia y en las instituciones educativas. Él canta en silla de ruedas, no se cohíbe por su condición, su acercamiento al público es mediante la observación y la comunicación a través de sus melodías mexicanas.
“Yo digo que tienes que ser tú desde el principio, y tienes que aprender a vivir con eso”, comentó.
“Hermoso Cariño”, del compositor originario de San Luis Potosí, Fernando Z. Maldonado, es la melodía preferida del adolescente, pues es la que más le llega a su público, al que le gusta animar mientras canta, dijo.
“Mi conexión con el público es muy bonita porque desde que entras das la primera impresión, tienes que comunicarte, ver las personas, moverte, y es bonito porque las personas te apoyan”, expresó.
Laura Yucari Ramos, madre del cantante, compartió en entrevista que su hijo empezó a cantar en los festivales del 10 de mayo en las escuelas, y desde ahí no ha parado de interpretar canciones mexicanas.
Recordó que desde que aprendió a pronunciar las primeras palabras, también empezó a cantar, pero fue en el nivel primaria que se interesó por concursar.
“Supimos que le gustaba cantar, entonces empezamos a apoyarlo. No tuvo problemas de lenguaje, su parálisis sólo es motriz, en sus piernas, neurológicamente él está muy bien”, dijo.
Contó que al recibir la noticia de su padecimiento en lo único que pensó fue en “echarle ganas”, pues su hijo no tenía movimiento, fue con las terapias y dos cirugías que logró ser independiente. “A pesar de las noticias malas hay que seguirlo intentando”, expuso.