Las remesas enviadas a México podrían registrar una caída de 5.8 por ciento en 2025, a 61 mil millones de dólares, por una menor inserción de migrantes al mercado laboral de Estado Unidos y la apreciación del peso frente al dólar, estimó BBVA.

Este monto es inferior a los 64.7 mil millones de dólares registrados por recepción de remesas durante 2024.

En la presentación del Anuario de Migración y Remesas 2025, BBVA México dijo que el reciente impuesto de 1 por ciento para las remesas en efectivo -aprobado dentro del paquete fiscal en Estados Unidos el pasado 4 de julio-, tendrá efectos marginales.

Lo anterior porque cerca del 85 por ciento de los migrantes mexicanos en Estados Unidos tienen al menos una cuenta bancaria en aquel país, por lo que la mayoría tiene medios para evitar este impuesto.

«Dado lo anterior, los efectos entre la población mexicana no se prevén significativos, pero sí podrían amplificarse entre la población de origen centroamericano», expuso la institución financiera.

BBVA añadió que su proyección en la caída de remesas para este año va en línea con la tendencia observada desde noviembre de 2023.

Tan solo en junio de este año, el ingreso por remesas registró una caída de 16.2 por ciento, de manera que las remesas acumulan 20 meses de inestabilidad, es decir, al menos desde un año antes de que Trump volviera a ser electo como Presidente de Estados Unidos.

«La principal causa que explica las variaciones en el flujo de remesas a México en los últimos meses se debe a una menor inserción de nuevos migrantes al mercado laboral.

«La apreciación del peso frente al dólar y la actual política migratoria en Estados Unidos son factores complementarios que afectan el envío de remesas», explicó.

Destaca que entre los hogares en México que son receptores de remesas, estas representaron en promedio el 30.5 por ciento de sus ingresos en 2022.

A nivel distributivo, la recepción de remesas es un proceso que se observa en todos los deciles de ingreso en México; sin embargo, los cinco más bajos concentran el 58.7 por ciento de los hogares que reciben estos ingresos.

En lo que respecta a su salud financiera, las personas que forman parte de hogares receptores de remesas muestran mayor libertad financiera, pero menor resiliencia económica; mayor número de adultos con ahorros, pero menor tenencia de créditos formales y una mayor prevalencia en zonas rurales, con jefatura femenina del hogar y presencia de menores de edad y adultos mayores.

El Anuario de Migración y Remesas 2025 también destaca que a nivel nacional las remesas representaron en 2024, el 3.5 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).

En el caso de Chiapas, estas significaron el 14.6 por ciento del PIB estatal, siendo el porcentaje más alto entre las 32 entidades federativas.

Sin embargo, los siguientes lugares los ocupan Guerrero, Michoacán, Zacatecas y Oaxaca.

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