Dos altos ejecutivos del sector hospitalario en El Paso se entregaron al FBI la semana pasada, luego de ser acusados formalmente de orquestar un millonario fraude contra una aseguradora privada mediante la presentación de reclamos médicos falsos por pruebas realizadas a pacientes inexistentes.
Los acusados, José Huerta, de 58 años, director ejecutivo de dos hospitales de Cuidados Intensivos a Largo Plazo (Long-Term Acute Care Hospitals), e Israel Navarro, de 47, propietario de uno de esos hospitales y vinculado financieramente con el otro, fueron acusados el 25 de junio de 2025 de conspiración para cometer fraude electrónico y por correo, informó la Fiscalía Federal para el Distrito Oeste de Texas.
Según la acusación, ambos ejecutivos “conspiraron para diseñar y ejecutar un esquema de facturación ilegal de pruebas de drogas en orina” (UDT) durante al menos seis meses, en los que enviaron reclamos por un total de 16 millones de dólares a la aseguradora Blue Cross Blue Shield.
Las pruebas, según declararon, habrían sido realizadas por personal médico de sus hospitales y enviadas a un laboratorio en el área de Dallas. Sin embargo, las autoridades federales señalaron que ningún paciente existía y ninguna prueba fue realizada.
“Todo esto era falso”, enfatizó el comunicado del fiscal federal Justin R. Simmons, quien confirmó que los reclamos eran parte de un elaborado esquema de “facturación indirecta” (pass-through billing), una práctica que consiste en inflar o falsificar costos médicos al enviar muestras a laboratorios externos, pero facturarlas como si hubieran sido tratadas internamente.
Arrestos voluntarios y proceso judicial en marcha
Israel Navarro, residente entre Puerto Rico y el área de Dallas, se entregó voluntariamente a los agentes del FBI en El Paso el 22 de julio y compareció ante un juez federal ese mismo día. Fue liberado bajo fianza de 150 mil dólares. José Huerta hizo lo propio un día después y fue liberado bajo fianza de 50 mil dólares.
Ambos enfrentan hasta 20 años de prisión por cada cargo, así como multas individuales de hasta 250 mil dólares en caso de ser hallados culpables. Hasta el momento, no se han presentado cargos contra otros posibles co-conspiradores.
El caso está siendo investigado por el FBI y el Departamento de Seguros de Texas, y será procesado por la fiscal federal Debra Kanof. Los abogados defensores de Huerta y Navarro no respondieron de inmediato a las solicitudes de comentario.