Hollywood criticó a la Casa Blanca por atentar contra la libertad de expresión después de que ABC retirara el programa del presentador Jimmy Kimmel el miércoles, tras amenazas regulatorias del Gobierno de Donald Trump, luego de sus comentarios sobre el asesinato del activista conservador Charlie Kirk.
La cadena, propiedad de Walt Disney, anunció que retiraba Jimmy Kimmel Live! de manera indefinida después de que al menos una filial dijera que reemplazaría el programa en sus señales, y el principal regulador de comunicaciones del país amenazara con investigaciones por las declaraciones de Kimmel.
El presentador, que con frecuencia critica a Trump, sugirió en su monólogo del lunes que los aliados de Kirk estaban usando su muerte para «ganar puntos políticos».
Sindicatos que representan a escritores y actores señalaron que la medida constituye un ataque a los derechos de libertad de expresión protegidos por la Constitución, y que ABC no debía ceder ante la presión del Gobierno de Estados Unidos.
La suspensión del programa se suma a recientes acciones contra figuras de medios, académicos y empleados de empresas tras comentarios sobre Kirk, asesinado hace una semana en Utah.
«Lo que hemos firmado, por doloroso que sea a veces, es nuestro acuerdo en la libertad para discrepar», indicaron los sindicatos de guionistas del este y oeste de Estados Unidos en declaración conjunta. «Vergüenza debería darles a los gobernantes que olvidan esta verdad fundacional. Silenciarnos empobrece al mundo entero».
Un sospechoso de 22 años ha sido acusado del asesinato de Kirk, pero el móvil exacto sigue sin aclararse. La muerte del activista provocó dolor entre sus seguidores y ataques de algunos líderes de derecha contra quienes criticaron o bromearon sobre su asesinato.
SAG-AFTRA, sindicato de actores, condenó la decisión de ABC, señalando que «suspender la emisión de Jimmy Kimmel Live! es el tipo de supresión que pone en peligro las libertades de todos».
El actor Ben Stiller también expresó en X que «esto no está bien».
El presidente Donald Trump ha amenazado repetidamente con retirar licencias a cadenas de televisión y presionar a emisoras para que eliminen contenidos que considera censurables, e incluso presentó una demanda de 15 mil millones de dólares contra el New York Times.
El miércoles, Brendan Carr, presidente de la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC), instó a las filiales locales a dejar de emitir el programa.
Kimmel no respondió a solicitudes de comentarios.
ABC tomó la decisión después de que Nexstar Media Group, propietaria de 32 filiales de ABC, anunció que dejaría de transmitir el programa tras los comentarios de Kimmel el 10 de septiembre, cuando ugirió que «la pandilla MAGA» estaba «haciendo todo lo posible para ganar puntos políticos» con el asesinato de Kirk y comparó el luto de Trump con «cómo un niño de cuatro años llora a un pez de colores».
Carr advirtió que «podemos hacer esto por las buenas o por las malas», sugiriendo posibles investigaciones y multas.
La Federación Estadounidense de Músicos calificó la acción de «censura de Estado», afirmando que la FCC identificó el discurso que no le gustaba y amenazó a ABC con represalias extremas.