Nuevo Casas Grandes.- Una ola de asesinatos atroces han marcado a Nuevo Casas Grandes en el lapso de sólo un mes, impactando de manera negativa a la ciudadanía y la región por la violencia extrema con la que fueron asesinados un presunto narcomenudista, un médico en su casa, cuatro hombres que fueron ejecutados y apilados en la calle, así como la extrema tortura de un adulto mayor que dejaron mutilado y quemado como “trofeo” sobre su propio andador.

La serie de hechos violentos se han registrado en calles que se encuentran bajo vigilancia del Mando Único de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado (SSPE), que pese a tener “funcionando” todas sus cámaras del Sistema Centinela, e incluso de establecer operativos de “presencia policiaca”, no han podido inhibir la delincuencia, y tampoco han esclarecido estos casos.

De estas personas asesinadas en calles de Nuevo Casas Grandes, el sentimiento de mayor incertidumbre para los ciudadanos de Nuevo Casas Grandes es que ninguno de estos casos ha sido resuelto a la fecha, pese a que al menos en el homicidio del médico Leopoldo Nevárez Madariaga de 81 años, se halló su auto chocado rumbo a Ascensión, a 110 kilómetros del lugar del asesinato, y ya se sospecha de alguien.

De los hechos que más han escandalizado a la comunidad, iniciaron pasada la primera semana de julio, cuando el viernes 11 de julio fue hallado en la vía pública el cadáver de un hombre ejecutado y torturado con saña, a quien sus victimarios le cercenaron un dedo y se lo colocaron en la boca junto con un envoltorio con la droga conocida como “cristal”.

La identidad de la víctima no ha sido revelada por las autoridades, que mantienen el caso en reserva y del que ya no se ha informado más, solo que cuenta con 40 o 45 años y que fue atado de manos y pies para ser golpeado, cercenado y luego ejecutado con el tiro de gracia, quedando su cuerpo abandonado a las 11:00 de la noche en el cruce de las calles Gabino Barrera y Libertad de la colonia Dublán.

Pasó apenas una semana cuando en la avenida Abraham González y calle 6 de Marzo de la zona Centro, a las 3:34 de la tarde se localizó el cuerpo sin vida del médico Nevárez Madariaga, quien recibió múltiples cuchilladas en el cuerpo y asimismo, con la misma arma fue degollado, por lo que fue encontrado en un charco de sangre dentro de su propia casa.

Horas más tarde rumbo a Ascensión, en el punto conocido como El Peñasco, se localizó el auto Honda Accord 2003 de color plata, propiedad de la víctima, por lo que las autoridades ya tienen una pista del presunto, aunque a un mes de esos hechos, no ha sido detenido.

Días después, el sábado 9 de agosto, en las calles Madrid y Gladiola de la colonia PRI mientras la SSPE realizaba un operativo especial de patrullaje en las calles de Nuevo Casas Grandes, fueron abandonados los cuerpos de cuatro hombres que presentaban señas de haber sido torturados con saña y ejecutados, uno de los cuales incluso tenía un dedo cercenado.

De las víctimas, hasta el momento las autoridades sólo han dado a conocer la identidad de dos hombres, quienes se reveló, contaban con reporte de desaparición de persona tanto en el Pueblo Mágico de Casas Grandes como en Nuevo Casas Grandes, pero no se ha revelado la identidad de las otras víctimas.

Más recientemente, el pasado lunes en la tarde las autoridades fueron avisadas del hallazgo de un adulto mayor que fue torturado hasta su muerte, a quien sus agresores lo amarraron sobre su propio andador y lo estuvieron acuchillando, quemando, le cercenaron dedos de sus pies, sus orejas y uno de sus antebrazos, dejándolo ahí amarrado.

En este caso donde la víctima fue identificada como Rubén Pérez Torres de 82 años, junto a su casa en la avenida Abraham González, por la calle Juan Mata Ortiz, está una cámara del Sistema Centinela, y hasta ayer no se tenía ningún avance ni comunicado por parte de la SSPE, que sigue manteniendo en secreto todos los resultados de ese sistema que fue diseñado para “darle seguridad a la ciudad”.

Cabe señalar que además de estos homicidios cruentos, la ciudadanía está inconforme por el alto número de accidentes y personas atropelladas que pese a fallecer bajo las cámaras de ese Sistema Centinela, no se ha hecho nada al respecto ni se han dado a conocer resultados para tranquilidad de los habitantes de Nuevo Casas Grandes.

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