Kilmar Ábrego García se declaró inocente de cargos de tráfico de personas durante una comparecencia en el tribunal federal en Tennessee el viernes.
Ábrego García es ciudadano de El Salvador y había estado viviendo legalmente en Estados Unidos hasta que fue deportado por error en marzo. Su caso se ha convertido en un punto de unión para la oposición a la agenda de deportaciones masivas del presidente estadounidense Donald Trump.
Ante la creciente presión para devolver a Ábrego García a Estados Unidos, el gobierno federal lo trajo de regreso la semana pasada. Sin embargo, fue inmediatamente detenido por nuevos cargos criminales presentados por la fiscalía federal para el Distrito Medio de Tennessee. En documentos judiciales, los fiscales lo acusaron de ser un miembro peligroso de la notoria pandilla MS-13, pero los cargos en su contra son sólo por transportar a personas que estaban en el país ilegalmente.
Aun así, podría enfrentar una larga sentencia en prisión. Se le acusa de transportar a cientos de personas durante muchos años, y la sentencia máxima por transportar a cada persona es de 10 años.