Chilpancingo, México.-Brayan Rodríguez Jiménez exigió a la Fiscalía General del Estado (FGE) les entregue los cuerpos de sus padres asesinados, Marla Jiménez Carachure y Ángel Rodríguez, quienes en distintos hechos fueron plagiados y después hallados muertos en fosas clandestinas en Guerrero.
Mientras que en el caso de su madre Marla Jiménez tiene más de un año que la FGE tiene su cuerpo, con su padre Ángel Rodríguez ya pasaron más de seis años de que no les han entregado el cadáver.
Marla Jiménez, quien era profesora e impartía clases en una escuela primaria en Tlacotepec, cabecera municipal de Heliodoro Castillo, fue privada de su libertad junto con tres maestros el 26 de julio de 2019 cuando viajaban en su camioneta rumbo a Acapulco para realizar un trámite en las oficinas del ISSSTE.
Fue hasta marzo de 2024 que el cadáver de Marla fue hallado por integrantes de un colectivo de búsqueda en una fosa clandestina en el parque El Veladero, en la zona suburbana de Acapulco.
Pese a que los hijos de la profesora aseguran haber cumplido el trámite administrativo y la confronta genética, la FGE no les ha entregado el cadáver.
«Incluso después del huracán John (en septiembre del 2024) personal del Servicio Médico Forense de Acapulco se llevaron el cadáver de mi mamá a la Ciudad de México a otra unidad forense, y no sabemos los motivos y lo que exigimos es que nos entreguen su cuerpo para darle sepultura», dijo Brayan.
En el caso del cadáver de su papá Ángel Rodríguez, mencionó que está en el Servicio Médico Forense de Chilpancingo, y apenas la semana pasada la Fiscalía le informó que la confronta genética de él y sus dos hermanos resultó positiva.
En noviembre del 2018, Ángel Rodríguez estaba descansando en su sillón en su casa de la Calle Encino, en la Colonia Vista Hermosa, en Chilpancingo, cuando llegaron varios hombres armados quienes lo sacaron frente a su tres hijos menores de edad.
Días después de ese mismo mes de noviembre, Ángel Rodríguez fue hallado en una fosa clandestina en la comunidad de Amojileca, en la misma capital estatal.
Sin embargo después de casi siete años de haber sido localizado el cadáver de Ángel Rodríguez, apenas la FGE le informó a Bryan que ya puede realizar los trámites para que se lo entreguen, porque las pruebas de ADN resultaron positivas.
Gema Antúnez Flores, presidenta del colectivo María Herrera, señaló que los tres hijos de Marla Jiménez y Ángel Rodríguez siguen viviendo una situación traumática muy delicada tras la desaparición y asesinato de sus padres, ya que cuando ocurrieron los hechos eran menores de edad.
«En el 2018 cuando Ángel Rodríguez fue sacado de su casa por un grupo de delincuentes ahí estaban sus tres hijos llorando viendo como a su papá lo golpeaban y se lo llevaban», indicó Gema Antúnez.
La activista mencionó que después que ocurrieron las desapariciones de Marla Jiménez y Ángel Rodríguez, sus hijos no presentaron la denuncia ante las autoridades debido a que estaban niños y además tenían mucho miedo.
«Los muchachos siguen enfrentando una situación muy difícil y lo peor del caso es que ni siquiera han recibido ayuda psicológica de parte de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas que es un organismo que no sirve para nada», afirmó Gema Antúnez.
Denunció que el cadáver de Marla Jiménez fue llevado a la Ciudad de México, pero hasta el momento la Fiscalía de Guerrero no les ha informado a sus hijos en que unidad forense está.
Gema Antúnez consideró que el traslado «inexplicable» de los restos de la profesora desaparecida y asesinada es un ejemplo más de la ineficacia de las autoridades federales y estatales.
Recordó que los tres profesores que viajaban con Marla Jiménez que también fueron privados de su libertad siguen desaparecidos.