Ciudad de México.- La madrugada del jueves 1 de diciembre de 2022, los seleccionados nacionales abandonaron su hotel en pleno desierto de Qatar, que era más un búnker para evitarles tentaciones en caso de haberse hospedado en la ciudad.
Habían pasado unas horas del máximo fracaso de los últimos 8 Mundiales. El Tricolor que siempre se quedaba a la orilla de avanzar al quinto partido ahora ni había superado la Fase de Grupos. Le faltó un gol y mucho futbol para ir a Octavos, ya que apenas venció 2-1 a Arabia Saudita, al que se reencontrará mañana en los Cuartos de Final de la Copa Oro.
Se tocó fondo. Se dijo que habría cambios profundos, estructurales: desaparición de la multipropiedad, el análisis para reactivar el ascenso/descenso, la desaparición de la reclasificación en la Liga MX y hasta la absurda propuesta de promover los pasaportes comunitarios para los jugadores mexicanos en Europa.
De hecho, en la plantilla que disputa la Copa Oro aún se mantienen 12 de los jugadores que disputaron el Mundial de Qatar.
Guillermo Ochoa, Jorge Sánchez, Edson Álvarez, Carlos Rodríguez, Jesús Gallardo, César Montes, Johan Vásquez, Orbelín Pineda, Roberto Alvarado, Luis Chávez (ya baja por lesión), Alexis Vega y Raúl Jiménez han evitado la guillotina tras el fracaso en tierras asiáticas.
En realidad, México no había tocado fondo porque aún cayó más bajo. Se fueron Yon de Luisa y después Juan Carlos Rodríguez de la FMF. Cesaron al técnico Diego Cocca y después a Jaime Lozano. Se lanzó el S.O.S para que por tercera vez en la historia Javier Aguirre entrara como «bombero» rumbo al Mundial del 2026, para el que falta menos de un año.